¿Estás preparado para tener una mascota?

Reflexiona antes de adquirir o regalar un animal. Sus cuidados implican una responsabilidad legal y ética que durará muchos años. No juegues con su vida.

Un animal de compañía es indudablemente un excelente amigo del que recibirás mucho a cambio de muy poco. Pero hacerte cargo de un ser vivo, con necesidades que hay que satisfacer, es una decisión importante.

Este sencillo cuestionario puede ayudarte a valorar tu predisposición a la hora de disipar las dudas que puedan surgirte respecto de lo que significa hacerse cargo de una existencia durante un período de al menos 10 ó 15 años, aproximadamente la vida de un perro o gato.

Empieza imaginando que ya tienen tu animal de compañía en casa. Hazte la pregunta y anota la puntuación que encaje mejor con tus ideas y convicciones (a mayor acuerdo, mayor puntuación).

1. ¿Asumo la responsabilidad de cumplir con la legislación vigente, aceptando lo que en ella se exige (identificación, censo, buen trato, cuidados, espacio suficiente, etc.)?

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2. ¿Acepto el compromiso de educarlo para la convivencia e integración en la sociedad urbana, con paciencia y si recurrir al castigo físico?

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3. ¿Recojo sus excrementos de la vía pública y lo llevo siempre sujeto durante el paseo, como dicta la ley?

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4. ¿Le doy el tipo de comida adecuada y en la cantidad suficiente para su normal desarrollo?

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5. ¿Lo llevo al veterinario cuando lo precisa y le someto a los tratamientos preventivos al objeto de librarle de parásitos y enfermedades?

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6. ¿Me ocupo de que haga el ejercicio diario necesario en función de las exigencias etológicas de su especie, tamaño, raza, etc.?

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7. ¿Pido consejo al profesional para evita que se reproduzca indiscriminadamente, ejerciendo el control necesario a fin de impedir nacimientos no deseados?

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8. ¿Le ofrezco la compañía y afecto que necesita y merece?

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9. ¿Procuro que no moleste y si se da este supuesto voy a pedir disculpas a los afectados, intentando que no se repita?

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10. ¿Me preocupa su bienestar? ¿Lo considera y trato como uno más de la familia teniendo en cuenta sus necesidades e intereses como un ser sensible?

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Ahora suma los puntos y toma nota de los resultados.

40-50 puntos: Asumes la responsabilidad que conlleva tener un animal de compañía y tienes una buena predisposición para disfrutar de la convivencia con tu amigo “no humano”.

30-39 puntos: Eres consciente de las responsabilidades que comporta tener un animal de compañía y las aceptas. Pero necesitarías un poco más de tiempo antes de tomar esta determinación. Quizás la relación esporádica o periódica con el perro o gato de un vecino, de un amigo o de un familiar, te sería de utilizad en cuanto a experiencia, antes de decidirte por uno propio.

29 puntos o menos: Debes replantearte seriamente la posibilidad de tener un animal de compañía. Espera un tiempo prudencial (un año por ejemplo) y vuelve a hacer el test.