Veterinarios del Rof Codina sacrificaron ayer a un perro de caza que llegó al centro tan malherido que no tenía posibilidades de supervivencia. El animal fue encontrado ayer en la zona de Garabolos por una joven dispuesta a pagar los gastos sanitarios, que fue quien alertó a la Policía y a la Sociedad Protectora de Animales. El presidente de la entidad, Javier García Calleja, aseguró que nunca había visto tal grado de maltrato, según informa el diario El Progreso en su edición impresa de este domingo.
El animal, un macho cruce de grifón de color blanco y canela y unos cuatro años de edad, presentaba profundas heridas en el cuello. "Unas parecen ser el resultado de haber hurgado con un cuchillo para arrancarle el microchip", señaló García Calleja, que explicó que las heridas estaban tan infectadas que ya presentaban gusanos.
También en el cuello tenía otra herida profunda, del roce de la cuerda con la que permanecía atado y de su impulso para romperla. Además, el pene del animal parecía haber sido arrancado de su base y lo tenía practicamente desprendido. Los veterinarios calculan que el maltrato empezó, como mínimo, hace un mes por el estado de las heridas.
"Parece un caso de hacer sufrir por hacer sufrir. Esto es verdadero ensañamiento", apuntó el presidente de la Protectora, que explicó que incluso el equipo veterinario del Rof Codina se quedó "impresionado" al ver el estado del animal, que estaba agonizando.
ACTUALIZACIÓN 28 DE MAYO DE 2008
Piden una investigación sobre el maltrato
La Sociedad Protectora de Animales y Plantas está preparando un informe para entregar en la Fiscalía, en la Subdelegación del Gobierno y en la Delegación de Medio Ambiente. Pedirán a ambas instancias una investigación para tratar de localizar al autor o autores de las heridas. El presidente de la Protectora, Javier García Calleja, explicó que están recopilando todo el material con el que cuenta y entre el que se encuentran el informe de las lesiones que efectuó el Hospital Rof Codina, al que acompañan las fotografías de las heridas.
El informe recoge que el can tuvo un microchip que le debieron de arrancar hace unas cuatro semanas, a juzgar por los cortes profundos que presentaba en el cuello.
García Calleja apuntó que se trataba de un caso muy triste el de este perro por el estado en el que fue recogido. «Nos lleva a la conclusión -apuntó- de que en el entorno en el que vivimos hay individuos a los que hay que temer».
FUENTES: www.elprogreso.galiciae.com, www.lavozdegalicia.es
2 comentarios:
por favor que alguna entidad mundial, haga algo por los animales, especialmente por los perros ya que este problema y esta tortura se presente en todos los paises del mundo, pero a pocos les importa y lo peor de todo es que a esos pocos que este tema les es indiferente son los que estan manejando paises, ciudades, estados, etc.... por Dios hagamos algo, existimos personas que queremos hallar la manera de darles una vida digna a estos animalitos.
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